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Los muebles de fibra natural ahora se llevan dentro de casa ¿Cuál pondrías tú en tu casa?
Ratán, bambú, yute, mimbre… se niegan a esconderse hasta el próximo verano.
¿Quién dijo que las fibras son solo para el verano? Los diseños de bambú, ratán, mimbre, cáñamo, sisal, jacinto de agua, yute, esparto… han conquistado la decoración de interiores ¡en otoño e invierno! Su versatilidad hace de ellos un valor seguro al margen de la temperatura y el clima. Todo depende de cómo integres muebles y complementos de fibra en la deco.
Las fibras se meten dentro de casa y adoptan un papel protagonista para dar un toque natural a la deco de otoño.
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¿Un columpio?
Hearst
Un sillón colgante de ratán es la versión glamurosa de los columpios y hamacas de jardín.
Decora el salón con su diseño, tan envolvente como un nido, y disfruta con un suave vaivén. Es perfecto para cualquier momento y, en especial, para esas acogedoras tardes otoñales en las que no apetece salir. Añade un cojín y una manta, y ya tienes un rincón cómodo para practicar el nesting —o anidar— y quedarte en casa. Este modelo es de HK Living.
Canastos que vuelan... Las lámparas de fibra trenzada arrasan en decoración, como antes lo hicieron los cestos. Las fibras naturales se cuelan en el universo de la iluminación, donde adquieren mil y una formas.
Triunfan por su calidez, pero también por la mágica luz que se difunde a través de su entramado. Son tendencia las que tienen forma de canasta invertida en tamaño maxi, como estas lámparas de techo (desde 95,50 €), de la firma danesa Ib Laursen, de donde también proceden la mesa (382 €) y los complementos.
Esta vajilla lucirá espléndida en un día soleado de otoño. Y si la cambias por otra con un diseño contemporáneo, la mesa añadirá un contraste interesante en pleno invierno.
Mesa (219 €) y menaje estampado de la colección Moana (desde 8,45 €/pieza), de Bloomingville.
La creatividad convierte a las fibras vegetales en diseños artísticos tan espectaculares como este, un sofá con un respaldo elaborado a base de volutas digno de un palacio.
Dos características de muchas fibras —su flexibilidad y resistencia— hacen posible que, en manos de los diseñadores, algunas piezas alcancen la categoría de muebles joya o iconos de la decoración, como el célebre sillón Emmanuelle.
¡Seguro que quedará bien! Decorar con fibra cualquier rincón de la casa es buena idea porque se integra en todos los estilos decorativos y espacios. Vemos muebles y detalles en ambientes de look nórdico, bohemio chic, vintage, rústico actual y urbano…
Encajan por afinidad o por contraste, en función de cada estilo. Mesa de yute (137,75 €), cojines (desde 24 €) y colchones (41,25 € c/u), de la firma Madam Stoltz.
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