Un buen día, Paul Kirkman, director de un museo local, y su esposa Lilly Shahravesh, una diseñadora textil que dirige su propio negocio, se acercaron al estudio londinense de Ben Allen con el objetivo de encontrar ideas para renovar y ampliar su casa de estilo victoriano recién comprada en York.
Además de reformar el baño y la cocina, cambiar las ventanas y la calefacción, y modernizar la decoración, el matrimonio también deseaba crear ambientes más luminosos, convertir el espacio del ático en un segundo estudio, y conseguir almacenaje extra para su colección de bicicletas.
La inspiración llegó a través de las fachadas de ladrillo y los patios traseros que abundan en este vecindario situado junto al río Ouse. Así, la nueva extensión de la vivienda se construyó con ladrillos hechos a mano procedentes de York, incluyendo un pequeño jardín acristalado que aporta luz a los interiores.
Este espacio, conectado con el jardín interior, se distribuye en cocina, comedor, salón y zona de trabajo.
Los materiales son robustos, funcionales, y están diseñados para durar y mejorar con la edad, como las puertas de roble macizo de los armarios.
Proyecto e información: Cortesía de Studio Ben Allen.