Soy Georgina es el título de la esperadísima serie que Netflix estrena el 27 de enero. La protagonista es la influencer española Georgina Rodríguez, que ha formado una bonita y numerosísima familia con el futbolista Cristiano Ronaldo. Hoy en día, disfruta de una vida de ensueño, pero la empresaria tiene claro que "sé lo que es no tener nada y sé lo que es tener todo".
"Muchos conocen mi nombre, pocos saben quién soy". Así de contundente es la influencer española, que comparte sus orígenes humildes con Cristiano Ronaldo. La modelo no se olvida de su infancia por las calles de Jaca. Georgina Rodríguez tiene un gran espíritu de sacrificio. Intentó ser bailarina de ballet y estudiar moda.
Pasó un tiempo cuidando niños como au pair en Inglaterra para aprender inglés y volvió a España. “Mi llegada a Madrid fue tremenda. Estuve buscando muchos pisos baratos, de 300 €. Y acabé en un piso que era un trastero, con frío en invierno y un calor en verano…”.
Empezó a trabajar en la boutique de la firma Gucci, en plena Milla de Oro madrileña. En este lugar conoció al futbolista portugués que, ese momento, era titular del Real Madrid. Cristiano Ronaldo sucumbió a su sencillez y porque es una mujer entregada a la alegría que da la familia. Como asegura en la serie de Netflix: “Antes vendía bolsos en Serrano. Ahora los colecciona”.
La pareja de famosos disfruta de una vida familiar llena de lujos, con yates y aviones privados, además de distintas propiedades repartidas por todo el mundo y algunos hoteles inaugurados bajo la firma CR7, en los que ha invertido Cristiano Ronaldo, que actualmente juega en el Manchester United.
Sin embargo, una de sus favoritas es la casa de Turín. En esta bonita vivienda, con vistas hacia el centro de la ciudad italiana y rodeada por montañas, es un lugar muy querido por sus cuatro hijos —Cristiano Jr, Eva, Mateo y Alana— y seguro que también será uno de los favoritos de la pareja de gemelos, niño y niña, que esperan Georgina y Ronaldo.
La vivienda de Turín es muy grande. Tiene espacios verdes para que la famosísima familia numerosa disfrute de la naturaleza.
Salón
El salón tienes unas dimensiones enormes y el protagonista absoluto es un inmenso sofá esquinero de diseño tapizado en blanco. Hay detalles personalizados, como las fundas de cojín bordadas en dorado con las iniciales de Cristiano y Georgina.
Los metros se multiplican para crear un espacio multidisciplinar, como este fabuloso salón de juegos para celebrar un divertido cumpleaños de los pequeños.
No faltan en el salón las piezas de diseño, como esta fantástica lámpara arquitectónica situada sobre la mesa de comedor.
En la zona de comedor es imponente la mesa de mármol, que se acompaña de sillas ergonómicas, en tonos neutros. Son fantásticos los ventanales con vistas, que disfruta la familia en sus desayunos y cenas diarios.
Este rincón pop art de la casa de Georgina y Cristiano nos encanta y forma parte del open concept. La escultura de King Kong, en resina grafiteada, es una pieza interesante, que pues encargar en Arturgban. Los neones con las iniciales de ambos iluminan una lámpara en forma de superficie lunar.
Gimnasio, jardín y piscina
La propiedad está situada en la zona alta de la ciudad y está rodeada de naturaleza, así que la pareja ha instalado un pequeño gimnasio cubierto.
Como la casa está llena de niños, la idea de tener una piscina cubierta es sensacional. Las paredes de mármol y el techo estrellado con lucecitas led le dan mucho encanto. Las zonas húmedas se completan con un hammam y una bañera exenta para darse baños de hielo.
La terraza, con césped artificial, tiene una zona chill out para disfrutar de una panorámica 360º de Turín.
Dormitorio
Poco sabemos de este templo del descanso, aunque se atisba un cabecero tapizado en piel blanca, pero descubrimos que Giorgina y Ronaldo adoran compartir la cama con sus hijos más pequeños.
La casa de diseño de Madeira
Cristiano Ronaldo ama su isla, por eso desde hace años disfruta de esta magnífica vivienda de diseño, donde pasa temporadas con toda su familia, capitaneada por Georgina Rodríguez.
La mansión de Mánchester
La pareja disfruta mucho de la campiña inglesa y Georgina reconoce que "echaba de menos vivir en UK".