La dueña de este piso heredado en el centro de Oviedo deseaba convertirlo en una vivienda de alquiler de larga duración pero, ante todo, buscaba un perfil muy determinado de inquilino, y cobrar una renta por encima de la media de su zona. Algo que no habría sido posible con el estado de la casa por aquel entonces, ya que los espacios resultaban oscuros y el mobiliario era sumamente anticuado.
Fue entonces cuando decidió ponerse en manos del equipo de Ático Home Staging, que ajustaron el presupuesto lo máximo posible para conseguir un resultado óptimo pero asequible. ¡Te lo mostramos!
Cambiar las ventanas y hacer una instalación de gas y agua caliente, fueron dos de los objetivos principales de la reforma.
Las siguientes áreas que sufrieron modificaciones fueron la cocina y el baño. Sin duda, las zonas más sensibles a la hora de alquilar.
En el baño se quitó la bañera y se sustituyó por una ducha de la misma medida que la bañera. Ahora la estancia parece mucho más grande.
Las paredes de la vivienda se pintaron con un color neutro, se conservó la carpintería interior, se lacaron las puertas, los armarios, y también el cabecero de la habitación principal.
El detalle del césped en el balcón añade un punto de naturalidad muy necesaria para la vida urbanita.
Al añadir un escritorio a esta habitación, el espacio se vuelve mucho más funcional.
Al final, tan solo se invirtieron 2.800 euros en decoración, y después de una semana publicado en Idealista la propietaria pudo elegir el perfil de cliente de entre varios candidatos. Ahora disfruta de unos ingresos del 40% por encima de los alquilados en su calle que siguen sin reformar. ¡Chapó!
No te pierdas las fotos del antes a continuación, porque no tienen desperdicio...