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Hoy viajamos al corazón de Barcelona, concretamente, al barrio del Eixample. Allí se encuentra este piso de 75 metros cuadrados, propiedad de una joven con un bebé en camino, que ama el olor de verano, la playa, la arena y... ¡el sabor de las galletas! El proyecto de reforma e interiorismo, realizado por el estudio Insayn Design Society, ha logrado llevar las buenas vibras a cada rincón de la vivienda, eligiendo una decoración de estilo mediterráneo protagonizada por dos colores: terracota y beige, ambos inspirados en el atardecer y en el ambiente de la playa.
Para que el estilo del interiorismo se asemejara a la personalidad de la propietaria, se optó por dotarlo de curvas, apostando por el minimalismo.
Como la joven adora pasar tiempo con sus amigos, la cocina se planteó abierta e integrada en el salón.
Los azulejos están muy presentes en la vivienda, en zonas como la cocina y los baños, aportando cierto espíritu retro al interiorismo. ¡Genial!
Además, como teletrabaja, se diseñó un mobiliario a medida, combinando almacenaje inteligente y un espacio para trabajar sin perder ni un ápice de la esencia playera.
Como te decíamos al principio, también hay un bebé en camino, por lo que fue esencial crear una habitación para él con el mismo ambiente relajado inspirado en la playa, y ubicarla cerca del dormitorio principal.
El resultado es un piso fresco y joven, listo para vivir un verano sin fin.
Así estaba antes de la reforma
Proyecto e información: Cortesía de Insayn Design Society.