Instalar un gimnasio en casa es mucho más fácil de lo que crees. Para darle marcha al cuerpo no hace falta moverse del salón, pero sí acondicionar un poco el espacio. Estas ideas pueden servirte.
Puedes habilitar una zona del salón. Solo necesitas una esterilla, unas gomas elásticas, una pelota... ¡y disciplina!
Un espacio ventilado. Lo ideal es que la habitación que destines a gimnasio sea lo más diáfana posible y con pocos muebles, para no golpearte con ellos al moverte o saltar. Fundamental es también que tenga buena ventilación, una ventana que dé a la calle mejor que a un patio interior, para que se renueve el aire.
¿Dónde guardar lo necesario? Aunque la habitación apenas esté amueblada, sí que debe contar con un armario o un mueble en el que puedas guardar todos los elementos necesarios para tenerlos a mano: cuerda, pesas, gomas elásticas, steps y ropa deportiva, toallas... También un cajón grande con ruedas. (Más información: Consejos para guardar y ordenar el material deportivo en casa.)
Suelo protegido. Una alfombra preserva los pavimentos de madera o de cerámica de posibles golpes de mancuernas, barras, etc. y también los hace más cálidos, cuando hay que tumbarse para hacer abdominales, por ejemplo. Asimismo resultan muy prácticas las alfombras de goma, que se ensamblan por piezas como un puzle. Proporcionan un soporte blandito, sobre el que se puede estar descalzo, y se desmontan fácilmente.
UN ESPEJO DE CUERPO ENTERO. Colócalo en una de las paredes. Si te ves, podrás corregir las posturas y movimientos y el espacio parecerá más grande.
Echa mano de lo que hay en casa
- La escoba como barra para trabajar los oblicuos. Y dos botellas llenas de agua,
como pesas o mancuernas.
- Un banco, el mejor step. También te sirve una escalerita de las que usas para llegar a los armarios más altos. Sube y baja y fortalecerás piernas y corazón.
- Y para relajarse... Crea un rincón dentro de la sala de gimnasia para estirarte y tumbarte: coloca lamparitas tenues, velas, barritas de olor...
CÓMO MONTARTE EN TU SALÓN UN PEQUEÑO GIMNASIO PARA PRACTICAR YOGA O PILATES
Cómo elegir las zapatillas adecuadas para practicar deporte
Elección: Antes de comprarte unas, averigua qué tipo de pisada tienes para evitar futuras lesiones. Si es neutra, necesitarás unas que te den estabilidad, y si es pronadora, pisada hacia dentro, o supinadora, hacia fuera, debes optar por un calzado que equilibre las fuerzas y reduzca el impacto sobre el cuerpo.
Tipos de zapatillas: De sportwear son las que usamos para salir a la calle; las de running, elige las que sean ligeras, con la suela flexible y una buena amortiguación; las de training, deben tener una buena sujeción del pie, estabilidad y adherencia; y las de dancing, con una suela que permita el deslizamiento.
Evita usar las mismas deportivas para correr que para ir al gimnasio, ya que el uso inadecuado puede causarte lesiones. Calcula bien la talla, ten en cuenta que no deben quedar ni muy sueltas ni muy apretadas. Tienen que sujetar el talón para que no resbale, sin oprimir el resto del pie.
Duración: Deben estar fabricadas con un material resistente y fuerte que se adapte al pie. Cuando veas que se ha desgastado la suela y la puntera y que te duelen los pies, es señal de que han perdido amortiguación y debes renovarlas. Si haces running, cámbialas cada 700 ó 900 km.
Zapatillas para mujer:
Zapatillas para hombre:
