Los utilizamos habitualmente en el baño, pero los espejos tienen tal potencial decorativo que merecen salir del lavabo y recorrer la casa hasta encontrar su sitio.
Antes de elegir uno, piensa para qué lo quieres. ¿Mirarte en él antes de salir de casa? ¿Ampliar visualmente el espacio? ¿Duplicar una zona concreta? ¿O reflejar la luz natural para que un ambiente sea más luminoso? En función de lo que necesites, será más aconsejable recurrir a uno o a otro.
Si quieres echarte una última ojeada para comprobar que tu outfit es divino, te interesa un modelo de cuerpo entero. No hace falta que ocupe toda la pared: con 60 cm de ancho basta, lo que permite colocarlo, por ejemplo, por detrás de la puerta de tu dormitorio o dentro de la del armario. Para que no pese demasiado ni termine hundiendo la hoja, busca un diseño ligero, sin marco.
Que un espacio parezca más grande es una de las especialidades de los espejos. Un recibidor mini será visualmente el doble cuando forres una de las paredes y la transformes en una superficie espejada. ¿Cuál de ellas? La que creas que puede crear una sensación más armoniosa, lo que en decoración se traduce por una superficie cuadrada o rectangular sin estrecheces. Por eso, evita colocarlo en el lateral más pequeño para que no potencie el efecto túnel.
Alguna vez habrás pensado: ¿qué puedo poner yo en esta pared, que está tan desnuda? Si sitúas un espejo, replicarás exactamente lo que ya tienes, pero al otro lado. Es lo que se hizo en esta casa. Aquí puedes verla entera.
Importante: cuando coloques el espejo directamente sobre el suelo, apoyado en la pared, lo más probable es que describa un ligero plano inclinado para salvar el rodapié. Fija la parte superior con escarpias al muro para que no se resbale y caiga.
Ahora imagina que en el recibidor o en tu dormitorio, has creado un pequeño bodegón sobre la consola o la cómoda. Y ha quedado tan resultón que te gustaría que luciera mucho más. Coloca detrás de ella un espejo y destacará el doble.
Otra de las habilidades de un espejo es reflejar la luz natural que hay en un ambiente concreto. Ganarás luminosidad y alegría. ¿El truco? Sitúalo justo frente a la ventana, tal y como sucede en este comedor. Puedes ver cómo es el resto de la casa aquí.
Pero los espejos tienen un potencial decorativo por sí mismos. Los modelos de cornucopia que antes solo se veían en la casa de tu tía abuela, con un marco historiado y siempre en acabado oro, ahora se abren hueco en el salón y hacen excelentes migas con estilos nórdicos y actuales. Fíjate en este muestra. Si te gusta el espacio, descubre las demás habitaciones.
La forma del espejo también es importante, tanto para potenciar un espacio donde predominan las líneas curvas o rectas, como para hacer justo lo contrario y romper la uniformidad en un contraste muy atractivo. En este caso, se trataba de evitar ángulos. ¿Te apetece ver cómo es el piso completo?
Y aquí, un ejemplo de justo lo contrario. Este salón tendía claramente a los diseños rectos gracias a las baldas realizadas a medida y a la alfombra de franjas blancas y negras contrapeadas.
Pero la mesa oval y el espejo rematado en arco de medio punto suavizan y equilibran el ambiente. Fíjate en que el espejo tiene cuarterones: parece una ventana abierta al exterior, y las plantas sobre la embocadura de la chimena (que se reflejan al otro lado), bien podrían ser sus macetas. Fue una idea excelente, pero esta reforma tuvo muchas más.
Entre los efectos decorativos de los espejos está jugar al despiste. Si te das cuenta, en este recibidor hay un espejo redondo con marco negro. Pero, ¿está realmente?
Si estuviera, no podría reflejar el papel pintado que reviste la pared. ¿Qué ha pasado? ¿Han quitado la luna? No. Lo que se ha hecho es empapelar la pared de enfrente con el mismo modelo, de manera que se refleja en el espejo. Así, la pared principal ofrece una visión completa del delicado paisaje interior sin interrupciones.
Vamos ahora con otro juego óptico. Tenemos un precioso comedor que se comunica a través de un arco con otro espacio simétrico, con idéntico techo de vigas vistas y una segunda lámpara suspendida que es una réplica de la primera. Podría ser, pero no es el caso.
El gran espejo de suelo es el responsable del "engaño" visual, sobre todo porque su marco está pintado en un acabado similar al de las puertas reales. Gracias a él, nadie diría que esta vivienda tiene 70 metros cuadrados.
Aún queda un tip deco importante: cuando el espejo cumple la función de un cuadro, solo que en él se retratan imágenes diferentes en función de la actividad del ambiente.
El modelo rectangular, con marco también espejado, enriquece la pared en la que está ubicado gracias a las fotografías situadas frente a él. Pero si quien vive en la casa se detiene un segundo, se convierte en un retrato ¡realista hasta en el más mínimo detalle!
Y en un artículo sobre este tema no pueden faltar los espejos sol. Aquellos con marcos que recuerdan los rayos solares. De absoluta tendencia, quedan perfectos tanto si hacen un solo como cuando actúan con el resto de la banda.
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