La reforma y rehabilitación estructural de este espectacular piso en el céntrico barrio de Palacio en Madrid, pretendió desde el primer momento diseñar una vivienda moderna, con texturas tipo loft que evocasen un ligero toque neoyorquino y masculino, sin perder la esencia del lugar donde se encuentra emplazada: un edificio histórico construido en 1835.
Uno de los cambios más importantes de la reforma fue la nivelación del suelo en toda la vivienda, y el añadido de perfiles y chapas de acero para solucionar el deterioro de los elementos de madera en la estructura vertical.
Rescatando el estilo retro de los setenta, no en colorido pero sí en formas geométricas, el hexágono fue usado para fusionar los suelos de las zonas húmedas.
Del mismo modo, el color amarillo ahumado se empleó en los cristales para crear peceras de luz con un toque de la industrialización de los lofts neoyorquinos con puertas de acero. A la carpintería interior de madera, realizada a medida con una altura total de 280 centímetros, se le incorporó un tragaluz en la parte superior, consiguiendo que la luz rebote y se expanda por todo el pasillo de la vivienda.
No obstante, la joya de la reforma fue la isla con faldón ingletado realizada en cuarzo tipo mármol estatuario con suaves líneas grises que se entrecruzan y mezclan con un blanco impoluto, dotando al espacio de sofisticación y practicidad. Esta zona se realza a su vez con un foseado en el falso techo, proporcionando una luz uniforme con un carácter localizado y flexible, concibiendo el corazón donde posiblemente se escriban las historias de las personas que vivan en esta casa.
Por otro lado, se resaltó todo el perímetro dejando a la vista los muros de fábrica medianeros, así como toda la estructura vertical de madera aserrada, posteriormente reforzada con una iluminación focalizada mediante un foseado perimetral que ayuda a conseguir un ambiente íntimo.
La carpintería exterior en aluminio, de marco muy reducido con manivelas ocultas, amplió la superficie de cristal dejando pasar mayor cantidad de luz al interior.
ASÍ ESTABA EL PISO DURANTE LA OBRA: ¡ALUCINA!
Proyecto: Abreu Mesa Arquitectos. Interiorista: Laura Pineda.