¿Te imaginas lo que es vivir en una casa con tus 3 hijas adolescentes durmiendo en la misma habitación? Solo de pensar en semejante revuelo de hormonas, ¡seguro que aumentan tus niveles de cortisol! Pues eso era lo que ocurría en esta vivienda familiar, que las niñas acababan de alcanzar la pubertad y necesitaban su propio espacio para estudiar y disfrutar de cierta privacidad.
Además de ganar 4 habitaciones y actualizar los terminados de la vivienda, la propuesta de la interiorista Melchora Vidal planteó un cambio de distribución para ganar almacenaje en todos los dormitorios, y un espacio amplio para que las jóvenes pudieran estudiar cómodamente en sus nuevos cuartos.
Para potenciar la luz y el espacio útil, la orientación del salón se modificó, así como el tamaño de los muebles.
También se cambió la entrada de los dormitorios y la forma del pasillo para gozar de mayor amplitud y espacio.
El dormitorio principal tenía un mini vestidor que ofrecía muy poco almacenaje, así que se reemplazó por dos armarios empotrados de suelo a techo que aumentaron de manera considerable la capacidad para guardar la ropa.
SEGUNDO DORMITORIO
TERCER DORMITORIO
CUARTO DORMITORIO
ANTES DE LA REFORMA
Proyecto e información: Melchora Vidal, de Crea Spacios.