45 cocinas de color verde que te harán amar la naturaleza y sentir el frescor con solo verlas

Un nuevo concepto de cocina, y es que el color muchas veces determina la amplitud visual. Si tienes problemas de espacio utiliza siempre colores vivos que aporten luz a tu cocina y combínalo con suelos cálidos, como una tarima de madera. Utiliza toda la gama de almacenamiento posible para tener la cocina siempre ordenada e intentar conseguir algún espacio extra. La clave está en usar el color en los muebles inferiores y el blanco en los superiores. No encanta el verde oliva elegido en esta luminosa cocina.

La combinación de color, madera y mármol con un hidráulico en el suelo es perfecta. Es un diseño de El Corte Inglés.

La unificación de zócalo, encimera y fregadero en mármol Macael es muy acertado. El tono verde empolvado triunfa en los armarios inferiores de esta cocina. El toque retro corre a cargo de los tiradores tipo concha en color negro mate.

El diseño de los muebles de la cocina, funcional y moderno, apuesta por la combinación de blanco y verde con acabado lacado para potenciar la luminosidad natural de esta moderna casa (no te pierdas la original isla de cocina también en verde).

El verde empolvado de los muebles Kallarp en esta cocina Metod, luce estupendamente con la encimera de madera y la naturalidad de los tiradores en piel. Pero nada sería lo mismo sin el impactante contraste que le aporta el frente decorado en tonos oscuros.

Si quieres resaltar la luminosidad de tu cocina y disfrutar de un espacio cálido, apuesta por la combinación de electrodomésticos de acero y muebles de color verde con terminación en brillo. Este tipo de superficies son adecuadas para todo el mundo, desde los fans del minimalismo hasta las familias con hijos traviesos. Las manchas no son un problema, son muy fáciles de limpiar.

En esta cocina, con isla multifunción y comedor, los ambientes están delimitados por el estilo del mobiliario y los materiales. El color verde fresh es protagonista en el área de trabajo y el dúo madera y fibra, en el comedor.

Prescindir de armarios altos es una excelente solución para que la cocina parezca más grande, pero esto no siempre es posible. Una opción es sustituirlos por módulos con medidas inferiores a las estándar, alternar puertas con frentes abiertos y crear una composición que se adapte a tus necesidades y a las dimensiones de la estancia. Cocina Bodarp: puertas (desde 17 € c/u) y frentes de cajón (15 € c/u). Encimera laminada Ekbacken, en 246 x 2,8 cm (50 €). Modelo Lisabo, en fresno y abedul: mesa (99 €) y sillas (49 € c/u). Lámpara Knixhult, de bambú (40 €). Taburete Kyrre (14 €). Todo, de Ikea.

Sus colores pulcros y luminosos, las formas depuradas, los accesorios limpios en diseño... todo está cuidado al detalle en esta pequeña cocina abierta a la zona de estar donde se ha creado el office junto a la barra americana. La combinación de colores no puede ser más acertada.

La cocina de esta casa, pequeña y una distribución en "U", es un espacio aprovechado y cómodo. La estética se actualizó con un nuevo acabado para los muebles. Se pintaron en un tono alegre y luminoso que, además, pone un punto divertido en la decoración. Pintura al agua, con un acabado tiza, de Proa.

En esta cocina, el toque verde se añade únicamente en la pared de la zona de cocinado donde se instaló un gresite de color verde pistacho. Suficiente para que sea el punto focal de toda la cocina.

Alegre y muy pintoresca, así es esta encantadora cocina de estilo rústico. Nos encantan los techos de madera pintada y las vasijas puestas encima de la gran viga verde de madera.

Es maravilloso el encanto que desprenden las cocinas rústicas en colores empolvados, como este verde suave. En la elección de los muebles para el office no podían faltar la madera y las sillas de fibra. Unos sencillos cojines a rayas verdes crean el hilo conductor entre los dos espacios.

Si te gusta la naturaleza, en tu casa no pueden faltar las plantas. Además de decorar, purifican el aire, ayudan a reducir el estrés y la electricidad estática. En la cocina, coloca aquellas que puedas usar para condimentar la comida.

La pintura es uno de los recursos más baratos para modernizar tu casa. Pinta paredes, pero también armarios de la ropa, de la cocina o puertas de la casa. Sustituir una puerta interior tiene un coste medio de 200 €, pero si te animas a hacerlo tú, solo tendrás que comprar la imprimación, la pintura y los materiales de pintura. Cocina de IKEA.

Hecho a medida en verde esmeralda con los perfiles en dorado. Combinado con la encimera de terrazo, súper original.

Una cocina glamourosa y exótica tiene que tener un papel pintado con motivos botánicos sí o sí. ¿No queda espectacular? Es un proyecto de QBuro Interiors.

Hasta la cocina más sencilla de todas puede dar un giro de 360º en su decoración si jugamos bien con el color. En este espacio, el punto focal más intenso se centra en una de las paredes, jugado con pintura y papel pintado preparados para espacios húmedos. La llamativa combinación del verde billar rematado con un magnífico papel de estampado vegetal es perfecta. Como bálsamo relajante, las demás paredes y el suelo se revistieron en blanco roto.

El verde empolvado es perfecto si quieres tener una cocina dulce y sofisticada, sobre todo si lo combinas con un salpicadero de mármol y apliques dorados.

La cocina de este apartamento, decorada con armarios en color mint empolvado otorgan cierta calma a la estancia. Todo ello amenizado por los aires chic de las encimeras de mármol y los taburetes con estructura de cobre (por no mencionar al simpático pomerania que verás en las fotos a continuación).

La de tonalidades y materiales en esta cocina de Ikea: Azulejos tipo metro en verde, madera y blanco, ¡y muchas plantas! Una decoración muy veraniega.

El verde oscuro ofrece una tendencia más clásica; además, se complementa muy bien con los blancos y pequeños toques dorados. Esta cocina pertenece a un coqueto apartamento de apenas 38 metros cuadrados.

Un tono intenso de verde es ideal para añadir contraste a una cocina de techos altos y diseño moderno como esta. ¿Qué te parece el detalle de la alfombra?

Los azulejos tipo metro de color blanco son un must en toda cocina de estilo rústico chic, y si los combinas con unos armarios de color verde oscuro, apliques dorados y un suelo con baldosa hidráulica, ¡el resultado será así de bonito!

Una cocina abuhardillada repleta de luz natural y decorada con plantitas. ¡Bravo!

Si tienes la suerte de contar con un jardín junto a la cocina, ¡mejor imposible!

¿Hay algo más natural que la mezcla de la madera y el color verde de los árboles? Estas tonalidades dialogan muy bien entre sí.

Tan chic, tan limpia, tan pulida, tan minimalista... Y a ti, ¿te gustaría tener una cocina así? Para decorar no es necesario complicarse la vida.

El tono verde agua aporta frescura a esta cocina donde la lámpara se convierte en protagonista.

Verde y blanco, una mezcla perfecta para darle dulzura y frescura por igual a esta cocina de techos altos. Además, favorecen la difusión de la luz natural.

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Esta cocina se amuebló con armarios de obra en color blanco, para ganar en luminosidad, y con perfiles de madera en verde eucalipto. La encimera se realizó con azulejos, tal y como era habitual en las cocinas de inicios del siglo XX, y se remató con cantos de madera pintados en el mismo tono verde de los armarios. En el techo, las vigas de madera se recuperaron y pintaron en blanco.

En esta cocina, de unos 20 m², se instaló una península que se utiliza como zona de cocción y barra de desayunos. Además, con ella se amplía el espacio de almacenaje. Los colores: un ácido verde manzana y un sobrio y actual marrón wengué.

En esta cocina, proyectada por Jordi Tejedor, del Estudio de Diseño y Arquitectura Interior Cid Delta, la península se aprovechó para instalar el fregadero; al estar orientado hacia la ventana, se puede disfrutar de agradables vistas mientras se friega. Muebles Trend, de Leicht.

Los colores verdes combinados con el rojo que protagonizaron el desfile de Gucci, fueron claves en este proyecto de reforma para una cocina desactualizada, ya que funcionaban a la perfección con los marrones y las maderas de los años sesenta propias de la arquitectura existente.

En esta cocina blanca, el color verde lo pone el frontal de la encimera, gracias a un precioso turquesa brillante y degradado sobre ladrillo. Las plantas son la pincelada perfecta en este colorido mosaico.

Una península delimita el office y la zona de trabajo en esta cocina de planta alargada. Para amueblarla, la decoradora Loles Armengol, artífice de la reforma, eligió unos armarios laqueados en verde y con acabado satinado, de la firma Eilin. La encimera es el modelo Blanco Zeus de 3 cm de grosor, de Silestone.

Ni blancos, ni negros. En esta cocina los colores primarios son los verdaderos protagonistas. Rojo, azul, amarillo y verde sobre un lienzo de ladrillo. Para soñar... Pero sin duda los muebles de cocina verdes son los que ponen la nota cromática dominante.

Y si te gusta el turquesa, aquí va otra propuesta para añadirlo en tu cocina: en las paredes. ¿Su mejor aliado? El rojo vino y la madera.