Prepárate para olvidar todas tus creencias sobre los áticos, porque la vivienda que estás a punto de conocer es única en su especie.
Diseñado por Egue y Seta en un edificio de Barcelona, y bautizado como Private Sunset, este ático fue concebido como un refugio urbano con vocación hedonista, festiva y de gran extroversión. ¿Y a qué se debe semejante descripción?
Para empezar, a sus dos fabulosas terrazas al este y al oeste, es decir, con vistas al mar y a la montaña. En ellas, los propietarios y sus afortunados amigos, pueden disfrutar del cine a la fresca, de los chapuzones en la piscina, del relax en el jacuzzi, del placer de tomarse un cóctel en la barra, y de los suculentos platos procedentes de la barbacoa en un comedor exterior sin precedentes.
En el interior, una cocina abierta con isla, acabada en pizarra reconstituida, con electrodomésticos de diseño en color negro y una vegetación ingeniosamente situada, nos recibe y nos sorprende gracias a la iluminación indirecta alojada en el techo de chapa negra corrugada que, bajo su apariencia de corte industrial, esconde un innovador sistema de sonido domotizado.
A la derecha el salón, con sus butacas y su cómodo sofá enfrentados a una televisión sobredimensionada, se ofrece como lounge central y bisagra entre todas las zonas de la casa.
Desde aquí, no solo se ven la cocina y el comedor, sino ambas terrazas y el jardín interior. Además, es donde se pueden operar, mediante una interfaz digital, todos los contenidos multimedia y las diferentes escenas de iluminación de toda la casa.
En el comedor, las botellas de colores brillan a través de los frontales de mimbre metálico teñido de negro, haciendo de telón de fondo a una mesa de roble macizo que se apoya directamente contra una reproducción colorista de Warhol.
En el techo, una lámpara estilo candelabro industrial, se sostiene bajo un encofrado de micro-cemento.
Pasamos a continuación a uno de los dormitorios que conectan directamente con la terraza y el jacuzzi.
Aquí, bajo un falso lucernario y sobre una pared revestida en porcelánico efecto acero, disponen de todo el verdor necesario para propiciar un humor tropical, cálido y exótico mientras el pavimento trepa por las paredes y gira sobre el falso techo para crear un dosel abierto y de madera flanqueado por espejos.
Detrás, un vestidor compacto y un cuarto de baño perfectamente integrados, sobre los que la baldosa hexagonal de diseño geométrico de tonos azulados se conjuga con griferías oro rosa, cemento y carpinterías de color negro para un look masculino pero sofisticado.
En la habitación principal el cemento admite un dibujo oblicuo de perfiles dorados para crear un cabecero único que preside una cama extra grande fabricada a medida y en coordinación con las mesas de noche y los armarios suspendidos: un frontal continuo y practicable de frontales de mimbre metálico que sin llegar al techo ni al suelo, parece flotar sobre halos de luz led. Sobre ellos, a su vez, el verdor de plantas crasas descolgadas.
Descolgada también, pero en el lado opuesto de la cama, una hamaca de mimbre natural.
En el baño, el papel pintado con motivos de palmas combina con el azul del mueble lavabo mientras funciona como trasera gráfica para el espejo y la lámpara.
Proyecto e información: Cortesía de Egue y Seta.