Dificultad: Fácil. Tiempo: 40 min.
INGREDIENTES (4 personas):
- 250 g de masa quebrada
- 1 piña
- 12 fresas
- 400 g de queso ricotta
- 1 cucharada de azúcar
- 1 cucharadita de harina
- 30 g de mantequilla
- 2 cucharadas de azúcar moreno
- Hojas de menta
ELABORACIÓN:
1 Precalentar el horno a 180º C. Untar un molde con mantequilla y espolvorear con harina. Forrar con la masa quebrada descongelada y pinchar en toda la superficie con un tenedor para que no suba en el horno. Hornear hasta que la masa empiece a coger color. Retirar y reservar.
2 Batir ligeramente el queso ricotta con una cucharada de azúcar. Rellenar la masa ya horneada con el queso batido. Limpiar y picar las fresas y reservar.
3 Pelar y cortar en trozos pequeños la piña. Poner una sartén al fuego con la mantequilla y 2 cucharadas de azúcar moreno. Añadir la piña y saltear hasta que
se caramelice. Poner la piña sobre las tartaletas con el queso y las fresas. Terminar decorando con unas hojas de menta.